A las personas que tienen determinadas disminuciones físicas les resulta muy complicado realizar ciertas acciones con el ordenador que exigen desplazar el ratón. Afortunadamente todas ellas cuentan con HeadMouse, un sistema que actúa como sustituto del cursor trasladando sus funciones al rostro.
Los diversos movimientos que son llevados a cabo con cejas, ojos y otras partes de la cara son reproducidos directamente en el ordenador sin necesidad de utilizar el ratón en ningún momento.
Con tal de que HeadMouse detecte correctamente todas las acciones es necesario calibrar adecuadamente la cámara web que esté conectada al PC, ya que en caso contrario la interpretación podría ser errónea.
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